miércoles, 7 de marzo de 2012

no nos conformamos con lo que tenemos

Ayer estuve en la peluquería y a parte de salir monísima de la muerte, yo que tengo el pelo rizado, y muy rebelde, salí con alisado japonés y la chica que había a mi lado con un pelo liso absoluto salió con unas ondas de las que hoy le quedaran lo que a mi de alisado japonés, el caso es que saben como tocarnos la fibra y hacernos desear lo que no tenemos.
Es una reflexión en cuanto a la forma de encarar la vida, en general aceptamos como somos y no solemos luchar contra nuestra propia naturaleza, sea el pelo rizado o sea aceptar lo que tenemos o lo que ganamos, pero sea por avaricia, por envidia o por marketing agresivo, de repente olvidamos que el pelo se rizará solo con que alguien te sople al oído, o que no necesitamos una segunda vivienda o una casa de 5 habitaciones, sobre todo porque puede que no podamos pagarla o las cosas pueden ir mal, el caso es que todos desconectamos y oimos y vemos lo que queremos, y  no lo digo por nadie lo digo por mi misma que estuve a puto de caer en la trampa de una segunda vivienda y gracias a una inspiración divina en el último momento, ahora puedo soportar mi paro en unas condiciones aceptables, porque si pienso en como estaría con una vivienda que no podría pagar ni vender, estaría tan arrepentida como de mi alisado japones que se ha desvanecido sin dejar rastro.
Quizás y solo quizás , es verdad que los bancos nos pintaban mundos de fantasía, pero deberíamos  hacer examen de conciencia y reconocer que nos gustaba que nos adularan y que nos comportamos  como "nuevos ricos", es un buen examen de conciencia que pienso aplicarme para partir desde cero, porque si solo le echamos la culpa a los demás, volveremos a caer en los mismos errores y volveremos a caer ante el primer adulador que nos susurre al oído. besos arrepentidos.

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